domingo, 9 de septiembre de 2007

Balance F.E.R. Frente Estudiantes por la Resistencia, Conducción F.U.C 2007


Como Frente de Estudiantes por la Resistencia reivindicamos nuestra política de autoorganización, asambleísmo y horizontalidad como los ejes que, desde que asumimos como conducción, constantemente imprimimos en la dinámica de esta Federación. Consideramos que nuestro gremio debe ser parte de las luchas sociales no sólo acompañando sino que asumiendo una función protagónica, por esta razón, tomamos un compromiso con los sectores explotados y oprimidos, reivindicamos la unión obrero-estudiantil que ha sido el estandarte de las luchas históricas de la juventud universitaria argentina desde la reforma del 18, el cordobazo y las sucesivas luchas que se han venido presentando.

Siendo el 2006, el año previsto para una nueva Asamblea Universitaria que renovaría autoridades, nuevamente los sectores que concentran el poder en la universidad antepusieron sus intereses personales por sobre las demandas de discutir la implementación de un proceso amplio de debate, acerca de las dinámicas de participación y decisión en el marco de nuestra Universidad. En esta última posición de fomentar un proceso de reforma, se encontraba una mayoría de la comunidad universitaria, paradójicamente, minoritaria en el ejercicio del poder formal en las estructuras actuales. La decisión de la mayoría de una Asamblea Universitaria “autista” de avanzar en la consolidación de una nueva gestión, apelando a mecanismos tan ridículos como ilegales; al mismo tiempo que la desestimación de todas los planteos que implicaran poner como prioridad una reforma de los estatutos; nos llevó a tomar una medida de acción directa concretada en la toma de las diferentes facultades, a través de sus respectivas asambleas.

Fruto de la presión que generó la toma de la Universidad, por prácticamente 100 días, la Justicia Federal no pudo hacerse cargo del encubrimiento de un fraude tan obsceno y de consecuencias tan devastadoras para el resto de las Universidades Nacionales. Si bien esto no planteó ningún avance significativo sobre el reclamo de fondo, situó a los estudiantes en una posición más favorable para propiciar un cambio radical en las prioridades institucionales de la Universidad. Para este momento, todo indicaba que no era posible una elección de autoridades antepuesta a la discusión de los alcances de una modificación estatutaria, en el marco de la democratización planteada por los estudiantes.

El planteo de reforma y sus alcances atacaron la concentración misma del poder dentro de la Universidad. La defensa leonina de viejas conquistas por parte de los sectores más conservadores y su accionar abiertamente mafioso, en el que no faltaron amenazas a estudiantes ni atentados físicos sobre muchos compañeros, constituyeron un cuadro de situación de profunda tensión sobre esta Federación. En esta oportunidad, nos enfrentábamos abierta y públicamente a los grupos más poderosos de la política universitaria, regional y nacional, al mismo tiempo que sufrimos una desacreditación permanente por parte de los medios masivos de comunicación.
El levantamiento de la toma se dio en el marco de una discusión para elaborar una estrategia conjunta, sostenible en el tiempo, que tuviera como resultado la implementación de un verdadero proceso de discusión en todos los ámbitos de la universidad. Fueron las mismas asambleas que decidieron la medida de fuerza, las que cambiaron la metodología de este largo proceso en el que decidimos embarcarnos.

La asignatura pendiente de esta Federación es trabajar por generar el estado deliberativo permanente entre los estudiantes, necesario para lograr los objetivos que nos marcara nuestro Congreso Extraordinario. Esto debe darse en el marco de un acercamiento genuino a las realidades de cada facultad. Flaco favor a la necesaria reforma le hacen los eslóganes vacíos y consignistas, como así también primar las diferencias proselitistas y no aunar fuerzas contra nuestro verdadero antagónico que celebra con nuestras infértiles discusiones y, de esta manera, avanza libremente para organizarse utilizando a sectores que no se han permitido un verdadero proceso de discusión política. Es así como se han convertido en los históricos traidores del movimiento estudiantil entregando, a los sectores dominantes y de turno, las reivindicaciones que hemos conquistado y obstaculizando los procesos que intentamos llevar adelante, como la discusión por la democratización.

Este conflicto que parece haber mermado debe continuar más allá de una reforma estatutaria que sólo modifique, numéricamente, las proporciones en los diferentes órganos de gobierno. Cuando hablamos de democratización, entendemos un proceso dinámico que genera condiciones de mayor participación y pluralidad en las discusiones y decisiones en cuanto a la vida universitaria. Es una búsqueda en la que tratamos de enarbolar y crear un proceso de continuo replanteo de la democracia, dinamizando no solo las bases de la institución sino también de la sociedad misma, construyéndonos, cada día, en cada discusión como sujetos críticos.
En el marco de este proceso, el Frente de Estudiantes por la Resistencia sosteniendo su compromiso social, política que imprime como conducción, ha establecido lazos con diferentes organismos de Derechos Humanos, Sindicales y Sociales.

Es así que, llegado el año 2007 álgido en las protestas y luchas sociales, como Federación decidimos participar activamente marchando, codo a codo, junto a Zanón (bajo gestión obrera), nos hicimos presente en el reclamo por la aparición con vida de Otoño- Uriarte, marchamos junto a ATEN y su justo reclamo por un aumento del salario y el mejoramiento de las condiciones de trabajo, hecho que convergió en el fusilamiento público del compañero Carlos Fuentealba. Ante este hecho, siendo parte de la clase trabajadora, desde nuestra posición como estudiantes y como conducción de Federación tomamos la decisión política de sostener las medidas de fuerza adoptadas por el conjunto de los docentes y comunidad en general. También la FUC hace propio el reclamo de los compañeros de medicina, acompaña en el proceso de las Causas contra los genocidas y exigimos al gobierno la aparición con vida del compañero Jorge Julio López a diez días de cumplirse un año de su desaparición. En este sentido, no olvidamos a nuestros compañeros Sergio Avalos y Florencia Pennachi a quienes tenemos presente y seguimos esperando sin paralizarmos ante la falta de respuesta por parte de los responsables políticos y materiales.

A través de este largo proceso de lucha y reivindicación, de organización y resistencia, hemos transitado un largo camino de autocrítica y reflexión sobre nuestras acciones y la política que imprimimos a esta Federación, políticas que una vez más afirmamos. Es nuestro desafío seguir construyendo a través de la Asamblea como órgano máximo de discusión y de toma de decisiones, reconociendo el consenso como parte de la misma y la Horizontalidad que rompe contra la organización jerárquica y verticalista que vuelve arbitraria la participación.
Sabemos que debemos afianzar la comunicación entre todos los asentamientos que forman parte de nuestra Universidad para tomar cada reclamo como propio y así que la Federación no sea únicamente los centros académicos que se encuentran en “La Barda” (Neuquén) sino que, los Centros Universitarios de Cipolletti, Allen, Cinco Saltos, Fishke Menucó (Roca), Villa Regina, Viedma, Bariloche, Zapala y San Martin de los Andes también se identifiquen y se sientan parte y participe de la Federación Universitaria del Comahue.

Debemos profundizar en las discusiones académicas, en el perfil de profesionales que queremos ser: ¿un ingeniero que esté al servicio de las transnacionales como Repsol?, ¿Asistentes sociales que sean funcionales al sistema y controladores sociales?, ¿Licenciados en Ciencias Políticas, Secretarios encubridores del gobierno de turno?.....En fin…profesionales ¿al servicio de qué y de quienes ? ¿De los explotadores o del Pueblo?. Todo esto forma parte de nuestro proyecto político fundado en la democratización de todos y cada uno de los espacios de discusión y decisión, espacios como Bienestar Estudiantil, Extensión e Investigación.

Apostamos a que la futura conducción, más allá del resultado final de este Congreso Ordinario de Federación debe hacerse voz y acción de cada uno de estos puntos para avanzar en una construcción conjunta por una Universidad Pública, Gratuita y Laica en pos de los Trabajadores.

Frente de Estudiantes por la Resistencia en la conducción de la F.U.C